domingo, 15 de abril de 2012

Migas






Las migas son un plato muy típico del sur de España, originariamente se hacían para aprovechar  las sobras de pan duro. Últimamente casi no se ven en ningún sitio, o por lo menos yo no tengo la impresión de que se encuentren fácilmente en los menús de los restaurantes, tampoco creo que sea un plato muy común en las casas españoles de los últimos tiempos. Supongo que esto se debe a que tienen muy mala fama en lo que a engordar se refiere.


En cualquier caso, aunque no sea un plato que cocinemos todos los días está bien para de vez en cuando, lo bueno que tienen es que son plato único pues según las combinemos nos sirven de desayuno (si se toman con café), de comida (si se comen con chorizo) y  postre (si se toman con uvas).


En mi casa hacemos la receta del abuelo, que como buen extremeño, las lleva haciendo toda la vida.


Ingredientes


1/2 kg. de pan duro.
2 dientes de ajo
aceite
agua
sal
50gr. de Chorizo.
A gusto panceta, pimientos, tocino, uvas.






Originalmente se usaba el pan duro, cortado en rodajas muy finas, y luego esas rodajas cortadas en trozos pequeños. Actualmente, se pueden comprar bolsas ya hechas migas en las panaderías.










Se extienden las migas en un trapo o bandeja grande para que no queden amontonadas unas encima de otras. En un bol de desayuno lleno de agua se echa una cucharada de sal y cuando esté disuelta se va echando el agua por encima de las migas en forma de lluvia, con la mano. Se van moviendo las migas para que se impregnen todas bien.
Una vez acabada toda el agua, se cubren un trapo de cocina y se dejan reposar una media hora, para que queden bien húmedas.


Se corta el chorizo en trozos muy pequeños, y si queréis usarlos también la panceta, el pimiento o el tocino. Si el chorizo no esta crudo no es necesario freírlo. Poner a parte.


En la misma sarten con dos dedos de aceite esté caliente dorar dos o tres dientes de ajo enteros. Incorporar todas las migas de golpe y todos los trozos puestos a parte, y  remover con paciencia hasta que toda
s las migas cojan el color del chorizo. Un poco coloradito, y las migas muy sueltitas, es necesario que se haya evaporado toda la humedad.


No deben quedar de sabor muy fuerte, yo no le pondría demasiado relleno pues quedaran demasiado sabrosas y perderéis la oportunidad de comerlas con café o uvas.


Al no ser que la idea sea comerlas de primero con por ejemplo un huevo frito.





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