Fructosa: Es un monosacárido que se encuentra en la fruta y la miel. Curiosamente tiene la misma fórmula que la glucosa pero con estructura diferente C6H12O6.
Conviene saber que el poder endulzante de la fructuctosa es mayor que el del azúcar, las calorías por gramo son casi igual 4oo cal/100gr, así que ingeriremos menos calorias al usar fructosa pues necesitamos usar menos cantidad de fructosa para endulzar lo mismo. Aunque como veremos en el siguiente parrafo eso no significa que engorde menos.
La diferencia entre el azúcar y la fructosa radica en que la glucosa del azúcar pasa directamente a la sangre y puede ser metabolizada por todas las células del cuerpo para generar energía, pero la fructosa debe ser en su totalidad metabolizada por el hígado por lo tanto se convierte en glucógeno, éste pasa a almacenarse en el hígado para utizarse si es necesario en forma de energía, pero lo que sobra se convierte directamente en grasa (Estudio realizado en la Universidad de Cincinnati y en el Instituto Alemán de Nutrición Humana, publicado en la revista Obesity Research) de donde se dedujo que el consumo de fructosa favorece el almacenamiento de grasa en el cuerpo.
Además, durante el proceso de metabolización de la fructosa se generan sustancias como acido úrico, lo que podría conllevar en caso de abuso a desarrollar gota. Dicen que un hígado sometido a grandes cantidades de fructosa podría acabar como el de un alcohólico.
Según mi manera de verlo, la fructosa es más natural que el azucar blanco procesado, y por lo tanto tomado con moderación es mucho mejor. Por su puesto estamos hablando de fructosa en polvo, obviamente el consumo de frutas, que son dulces por contener fructosa es más que saludable. Pero no constituye por sí misma un gran sustituto para el azúcar por las enfermedades que tiene asociadas, al fin y al cabo la fructosa es una de las dos moléculas que componen el azucar, osea más de lo mismo.
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